Stardust es una sonda de la NASA que fue lanzada en 1999 con el objetivo de tomar datos de los cometas. Esta semana (24 de marzo 2011) ha apagado sus motores y se ha despedido de nosotros.
En sus doce años de servicio consiguió algunos logros antes inimaginables, como la captura de polvo cósmico del cometa Wild 2 en 2004. Para lograrlo pasó a menos de 240 km del núcleo del cometa, recogió las muestras y las envió a la tierra en una cápsula que llegó en enero del año 2006
Otras tareas llevadas a cabo fueron la exploración del asteroide Annefrack y el acercamiento al cometa Tempel 1. Sin embargo, la vida útil de la sonda ha terminado y ya no puede seguir funcionando como instrumento científico, tal y como les está ocurriendo a los rovers marcianos.
La NASA hizo maniobrar a la sonda para vaciar el tanque de combustible y la abandonó a su suerte, dando por finalizada una misión que ya se había prolongado 5 años más de lo esperado.
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